COMO PINTAR UN RETRATO AL OLEO Paso a Paso. ( Parte 02)

SEGUNDA MEZCLA.- Preparación de los colores para el ropaje y cabellos de jesús.

Para el ropaje y cabellos necesitaremos colores más fríos y oscuros, por lo que debemos pensar que el azul será ahora el protagonista principal. El negro y la sombra tostada nos proporcionarán las variaciones de color. El rojo de cadmio no participa aquí. Los colores claros, que si hay, los obtendremos de manera muy simple. Solo bastará con que les añadas blanco para aclararlos. Ahora, Según tu ojo perciba, habrá zonas un tanto grises. Estos los podrás conseguir añadiendole a tus mezclas, toques de ocre o siena. Obtendrás grises cálidos muy similares a los de la imagen original. 

TERCERA MEZCLA.- Preparación de los colores para el fondo. 

El fondo tiene sus propias gamas de color ya que debe contrastar lo más que se pueda con la figura principal. Cómo es predominantemente oscuro, lo pintaremos con una mezcla de sombra tostada, negro, y rojo de cadmio, añadiendo eventualmente toquecitos de azul cobalto, solo para matizar esas áreas de mayor oscuridad. Para lograr las variaciones, nuevamente recurriremos a toquecitos de laca naranja o siena que se añadiran a esta mezcla base según lo vayas considerando; incluso en algunas zonas notarás como se revela tibiamente un poco ese color verde extraño. Simplemente añade a tus mismas mezclas un poco de verde pthalo hasta lograr ese matiz. Cuida siempre de no romper la armonía, es muy fácil si respetas con cabalidad el asunto de la combinación de colores. Recuerda, nunca se aplican solos, siempre combinándolos entre sí y respetando tu paleta.  *Nota: Siempre permite que el marrón del fondo que aplicaste de base “respire”, es decir , que no se pierda.

Se ordenado (a) al preparar los colores, pues de una mezcla primaria se obtiene una secundaria y luego otra terciaria. Mi recomendación es que trabajes   probando y comparando en la tela.

 Aplicación del color.

*Toma en cuenta lo siguiente antes de que empecemos a pintar.

La percepción del color es engañosa. Tiene mucho que ver con aspectos tales como la relación entre colores adyacentes, un objeto de cierto color no se verá igual sobre fondos diferentes o un objeto de color gris se verá muy diferente sobre un fondo blanco que sobre uno negro. Descaradamente se verá más claro sobre el fondo negro. Ó también será interesante observes cómo dos  colores complementarios, rojo y verde, por ejemplo cambian de aspecto si tan solo los aplicamos separados o muy aproximados. Te comento esto porque necesitarás algo de entrenamiento para calcular las cantidades en las mezclas anticipándote al resultado que tendrás en el lienzo. Esto es muy importante que lo tomes en cuenta, ok?, Empecemos a pintar.

Vierte un poco de aceite de linaza en un plato limpio y con un paño fino extiéndelo en toda la superficie del cuadro. Esto se hace cada ves que inicias sesión y tiene el fin de permitir a la pintura aplicarse con fluidez pero ten cuidado de no excederte pues se podría chorrear o escurrir y eso se notará siempre. Luego, con tus pinceles planos, cerda dura No. 8 empieza a pintar. Usa un pincel para los tonos y matices claros y otro para los oscuros para no contaminar ambas gamas. ¿Empezamos?

Haremos una aplicación general de los colores, cubriendo zonas amplias, sin detenernos en detalles, buscando la aproximación a los tonos originales, los de la fotografía de referencia usando nuestros colores ya preparados. Hazlo de un modo burdo y audaz, sin complicarte en perfilar o detallar nada, más bien analiza la similitud entre matices y sus grados de iluminación u obscuridad, (tonos). La idea es que pintes todo de este modo en una sola sesión que debería durar una hora o un poco mas. Pinta todos los colores de la escena, sin omitir ningún elemento importante: manto, cara, manos, cabello, pan, cara de judas, fondo, etc. NOTA: Cuida de no contaminar tus mezclas limpiando frecuentemente tus pinceles. Al terminar, tu lienzo debe verse mas o menos así.

Ya desde esta primera aplicación de color podemos vislumbrar el resultado final.
No crees?

Una ves hayas completado esta labor toma tu Pincel plano “ Suave” Oreja de Buey No.20, y  “envuelve” todo, o,  dicho de otro modo, cubre todos los espacios que hayas dejado sin pintar fusionando los colores, tonos y matices pero de un modo controlado, ¡OJO! No estás agregando color, solo estas distribuyéndolo ó acomodando el que ya aplicaste. No te preocupes si notas que se opacan algunos detalles como cejas u ojos, lo importante es que cubras todos los huecos que quedaron sin pintar y que modeles todo mejorando su aspecto. Después de hacer esto tu avance debe de verse más o menos así:

La idea es que la obra se vea próxima al modelo de un modo general, No importa, hasta
este momento  ningún detalle.

Entonación y ajuste de los colores.

Hasta aquí tenemos una base pictórica muy sólida que nos puede guiar para continuar la obra. Una ves seca podremos aplicar una segunda capa de color de un modo más preciso, buscando la entonación y ajuste de los colores obscuros y claros, matizandolos, contrastándolos. Siempre usando los mismos colores, nunca agregarás ni uno nuevo, y los mezclarás del mismo modo cómo lo hemos hecho hasta ahora. la diferencia solo estará en que según vayas avanzando capa tras capa, irás aproximándote poco a poco a los detalles, (*Sugiero investigues o repases teoría del color de vez en cuando): contraste, saturación del color, colores primarios, secundarios, etc. Como complemento para entender mejor el porqué manejamos los colores de este u otro modo).

En esta segunda capa, puedes empezar a detallar algunas cosas como son los pliegues de las manos, las texturas de las mangas, las arrugas de la frente, el cabello, en fin, es un proceso de varias capas (una por sesión) en las que irás “creciendo” tu obra dándole cada ves más vida y más realismo hasta terminarlo. A partir de esta segunda capa la duración de cada sesión dependerá del avance que desees darle a tu cuadro. La más importante recomendación es que una ves dejes de pintar en esta o cualquier sesión, deja por lo menos pasar dos días para asegurar que lo que hayas pintado ya deba estar completamente seco; no vaya a ser que te sorprenda una repentina coloración producto de una mezcla que aun estaba fresca. No olvides que entre sesión y sesión debes barnizar con aceite de linaza tu tela para que tu pintura se desplace con facilidad. Observa el avance que logré en cuatro subsiguientes sesiones:

Nota cómo fui perfeccionando las formas, sobre todo en las manos y la cara,
en esta tercera sesión.

Aunque avancé en el parecido, aún le falta mayor definición a los rasgos en general. Lo podrás notar claramente en el bigote; este se aprecia como manchas; le falta textura.

4a. Sesión. Trabajé en la túnica  para darle más apariencia de tela.

5a. Sesión. Ya es posible ver mayor naturalidad en las manos y en la cara de Jesús. El efecto de la luz de la antorcha atravezando la nariz creo es, bastante convincente.
Para las manos hube de apoyarme en una referencia fotográfica extra, gracias a la amable colaboración de La Menona: Esto fue porqué a decir verdad, las manos representan en cualquier proyecto artístico el mayor reto.

Las bellas manos de mi menona me sirvieron de referencia fidedigna.


NOTA: Al terminar cada sesión de aplicación de color, generalmente puedes “envolver” lo pintado aunque será tu sensibilidad quien decida si en alguna sesión tal ves no sea necesario hacerlo.

“MUY IMPORTANTE”. Un poco más acerca del hecho de dejar secar lo ya pintado entre sesiones. Siempre que inicies una sesión debes asegurarte de que la pintura de la sesión anterior haya secado por completo. Jamás pintes sobre pintura fresca, ya que puedes ensuciar tu aplicación anterior, distorsionarla o incluso borrarla, por el contrario, pintando sobre pintura seca podrás hacer efectos muy interesantes y en algunos casos necesarios para conseguir la apariencia de realismo, (las *veladuras, por ejemplo); por eso cada sesión debe ejecutarse con intervalos de dos días como mínimo entre una y otra, y puede durar de una a dos horas o hasta que el cuerpo aguante. Y en cuanto a la cantidad de sesiones pues solo puedo decirte que deberán ser todas las necesarias: 5, 7, o 10, es impreciso ya que dependerá de los avances que logres y de lo convencido(a) que estés de tus logros.

*Veladura: Es un método para pintar utilizando el efecto de la transparencia. Se logra diluyendo un poco más la pintura en aceite para hacerla mas transparente lo que permite que colores sobrepuestos se aprecien como uno solo. En acuarela es el requisito principal. Esta técnica ha sido empleada desde las épocas doradas de la pintura clásica.

ACABADO.

Es difícil e impreciso decir cuando ya estará acabado tu cuadro. Solo como recomendación, cuando el momento lo amerite procura revisar a detalle todos los elementos: manto, mangas, cara, cejas, ojos, manos, bigote, manos, uñas, pan, cara de judas, etc. Y ve aprobando su terminado. A estas alturas ya estas trabajando con tus pinceles más finos: Pincel redondo de cerda dura No.1 y Pinceles redondos “ Suaves” o de cerda suave, No. 1 Para trabajar los detalles aún más finos como pequeños brillos y cabellos,por ejemplo.

Y… ¡listo!, acabamos.

Mensaje especial: Si haz decidido pintar este cuadro siguiendo el tutorial, en verdad me dará mucho gusto saberlo. Enviáme tus fotos ó comentarios. De cualquier manera, anticipadamente  te doy las gracias. Suerte amigo artista!!.

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